La Casa Blanca reconoce que frenó ayuda militar a Ucrania
La Casa Blanca confirmó que este año retuvo un paquete de ayuda a Ucrania en parte porque quería que investigaran la presunta corrupción de los demócratas en las elecciones de 2016, lo que contradice la afirmación del presidente Donald Trump de que no condicionó la entrega de esa asistencia.
Las declaraciones del jefe de gabinete de Trump, Mick Mulvaney, marcan la primera admisión oficial de que el mandatario quería conseguir algo relacionado con la política electoral de EU cuando retuvo los casi 400 millones de dólares en ayuda a Ucrania, algo que forma parte de la investigación para un juicio político. ”
¿Me mencionó (Trump) la corrupción relacionada con el servidor (de correo electrónico) del DNC (Comité Nacional demócrata, secretariado del partido)? Absolutamente. No hay duda de ello. Y por eso retuvimos el dinero” que iba a parar a Ucrania, dijo Mulvaney en una rueda de prensa en la Casa Blanca.
“La revisión de lo que pasó en 2016 fue ciertamente parte de lo que le preocupaba (a Trump) en relación con la corrupción en ese país (Ucrania). Y eso es absolutamente apropiado”, agregó.
Mulvaney se refería a la sospecha de Trump de que un servidor del DNC pirateado por agentes de inteligencia rusos y que supuestamente contenía correos electrónicos de la que fuera su rival en las elecciones de 2016, Hillary Clinton, se encontraba en Ucrania, una teoría sobre la que no hay pruebas.
La investigación demócrata previa a un juicio político se ha centrado hasta ahora, sin embargo, en la posibilidad de que Trump pusiera otra condición para entregar la ayuda: una exigencia de que las autoridades ucranianas indagaran sobre la presunta corrupción en Ucrania del ex vicepresidente de EU Joe Biden y su hijo, Hunter.
Trump ha reconocido que presionó al presidente ucraniano, Vladímir Zelenski, para que investigara a Biden y a su hijo, pero ha rechazado haber retenido la ayuda económica para conseguirlo.
“El dinero que retuvimos no tuvo absolutamente nada que ver con Biden”, insistió Mulvaney.
No obstante, la admisión de Mulvaney de que Trump quería conseguir detalles relacionados con el DNC promete dar nuevos motivos a los demócratas para someterle a un juicio político, porque consiste igualmente en pedir ayuda a una potencia extranjera para un propósito partidista electoral.
Mulvaney argumentó que lo que hizo Trump “no es ilegal” porque condicionar el desembolso de ayuda económica forma parte del desempeño habitual de la “política exterior” estadounidense.
“Lo hacemos todo el rato”, añadió, y citó como ejemplo la ayuda que se suspendió a los países del Triángulo Norte de Centroamérica hasta que accedieron a cooperar con Washington para restringir la inmigración ilegal hacia Estados Unidos.
La diferencia con ese caso es que ese condicionamiento no tenía que ver con la petición de ayuda a un gobierno extranjero con propósitos electorales, algo que la oposición demócrata considera una violación merecedora de un posible proceso de destitución.
Mulvaney también alegó que Trump estaba tratando de impulsar la investigación abierta en el Departamento de Justicia sobre el pirateo del servidor de correo del DNC en 2016.
Pero un alto funcionario del Departamento de Justicia dijo a la cadena CNN que “si la Casa Blanca retuvo ayuda para lograr cooperación” en alguna de sus investigaciones, “esta es la primera noticia” que tienen de ello.