Oculta “El Bronco” el gasto público
Monterrey, Nuevo León (28 enero de 2020).- Tan sólo de 2016 al 2019 se ha mantenido oculto el destino de 6 mil 746.3 millones de pesos, es decir, el 40 por ciento del gasto que deberían difundir.
La Ley de Transparencia establece la obligación de publicar mensualmente cada pago a proveedores, contratistas, prestadores de servicios profesionales y en general toda erogación realizada, incluyendo a quién se paga y cuánto.
Lo anterior se deriva de una comparación entre los reportes de cuenta pública de 2016 a septiembre de 2019, que informan cifras generales sobre los egresos y los pagos individuales difundidos en los mismos años.
La revisión arrojó que de los 17 mil 065.8 millones de pesos reportados como pagados, sólo se han transparentado en lo individual 10 mil 319.5 millones, es decir, el 60 por ciento.
Los gastos que deben publicar incluyen, por ejemplo, compras de materiales, vehículos, equipos de cómputo y electrónicos, mobiliario, alimentos, combustibles, bienes inmuebles, maquinaria, productos químicos y medicamentos.
También servicios básicos como agua, gas, telefonía y electricidad; asesorías, consultoría y publicidad, y obras tanto públicas como en bienes propios.
Para conocer en su totalidad las listas de pagos publicadas por el Gobierno hay que consultar tres sitios distintos: el portal de transparencia estatal anterior, el actual y la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT), cada una con información parcial e incluso duplicada.
Si se suma la información completa disponible en la sección original y en la PNT, el total transparentado es de sólo 7 mil 603 millones de pesos, muy abajo de los 17 mil millones gastados.
Al consultar en diciembre sobre esta discrepancia, personal de la Tesorería afirmó que había más de 10 mil millones publicados, pero que había que considerar un apartado etiquetado como “contrataciones de servicios profesionales por honorarios” disponible en la versión actual del portal estatal.
Ese apartado no es de honorarios, sino de pagos en general que parecen “escondidos” bajo una etiqueta imprecisa, y contiene una versión más abultada del gasto.
Según el Gobierno, los pagos ocultos son para seguridad, donde ha habido cuestionamientos, como la compra de un dron hechizo, uniformes con sobreprecios y un software a una empresa fantasma de Genaro García Luna.Y todavía faltan miles de millones por transparentar.